Jeff Bezos, fundador de Amazon, tiene fe ciega en su proyecto más ambicioso. Y es que el segundo hombre más rico del mundo reveló recientemente que financia su empresa aeroespacialBlue Originpor medio de la venta anual de 1.000 millones de dólares en papeles de Amazon.
La iniciativa tiene el principal objetivo de ganar la carrera espacial, en la que grandes empresas como Elon Musk buscan hacer de los viajes turísticos un negocio rentable y sobre todo, accesible para muchos. ¿Será posible al corto plazo?
La tendencia más fuerte dentro de esta joven industria está basada en la utilización de cohetes reutilizables. Esto permitirá reducir los costos al poder reciclar los dispositivos destinados a propulsar cápsulas espaciales fuera de órbita.
El proyecto de Bezos tiene un costo total de 2.500 millones de dólares y sus primeros vuelos con pasajeros están programados para el 2018. Es más, en una reciente conferencia en Colorado, el magnate presentó una maqueta en tamaño real de la cápsula que será usada para transportar a los astronautas comerciales al espacio en vuelos cortos de 11 minutos.
Las cápsulas llamadas New Shepard tienen grandes ventanas para mejorar la vista del espacio. Asimismo, según la empresa, los pasajeros solo necesitarán un día de entrenamiento para realizar la aventura fuera del planeta.
Y aunque hasta el momento no hay información detallada sobre los precios, Bezos prometió que está concentrado en bajar los costos al nivel de un boleto de avión. Esto haría que millones de personas puedan realizar los viajes sin necesidad de que sean magnates adinerados.
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Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
La próxima ola de turistas espaciales necesitará una alta tolerancia a la incomodidad.
Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
“Mi consejo para ellos sería medicar pronto y a menudo”, dice Richard Garriott de Cayeux, el desarrollador de videojuegos y empresario que pagó US$ 30 millones a Space Adventures de Rusia para pasar 12 días a bordo de la Estación Espacial Internacional.
Los viajeros lunares han hecho un “depósito significativo”, de acuerdo con un posteo de la semana pasada en el sitio web de SpaceX , pero el precio total y las identidades de los turistas no han sido revelados.
La microgravedad que permite lo que Garriott de Cayeux describe como un movimiento “alegre, libre de sentimiento” asociado con los astronautas también tiene un grave efecto fisiológico.
“Los fluidos corporales dejan de fluir normalmente, por lo que, en el espacio, las caras de las personas parecen hinchadas, y generalmente tienen los ojos inyectados en sangre”, dice. “Se siente como estar en un tobogán para niños cabeza abajo. Los primeros días, se siente un poco de dolor de cabeza”. “Estos síntomas pueden ser remediados fácilmente con medicamentos comunes, como aspirina y Sudafed.
Otro efecto secundario proviene del líquido flotante en el oído interno, que normalmente ayuda a una persona a detectar el movimiento y mantener el equilibrio. En el espacio, por supuesto, también comienza a flotar.
“Si mueves la cabeza hacia adelante, se deslizará hacia atrás y te hará sentir como si estuvieras cayendo hacia atrás”, dice Garriott de Cayeux. “Hay un desacuerdo entre lo que ves que estás haciendo y lo que tu cuerpo piensa que está haciendo, y eso a menudo causa mareo”.
Esta desconexión perceptual tiende a durar unos tres días antes de que el cerebro comience a compensar. Cuando regresas a la Tierra, tarda otros tres días en reajustarse. Esta es otra desventaja del turismo espacial que se puede tratar con medicación.
Otros desafíos físicos son más difíciles de abordar y también menos agudos. Los seres humanos en el espacio sufren atrofia muscular y ósea. Los viajes espaciales requieren exposición a niveles crecientes de radiación, lo que puede llevar a sorprendentes efectos visuales.
Capacitar y prepararse mentalmente será probablemente el principal desafío para la próxima generación de turistas espaciales. “Esto no es como un avión donde los pilotos se sientan en el frente y hay una cabina de pasajeros en la que están sirviendo té y café”, dice Garriott de Cayeux.
“Pasé por todas las mismas clases que cualquier otro astronauta y cosmonauta”. Eso incluía aprender cómo operar cada pieza de equipo a bordo de la nave, incluyendo radios y sistemas de seguridad, y estudiar una larga lista de posibles fallas.
A pesar de las molestias y las dificultades de los viajes espaciales, Garriott de Cayeux, ahora de 55 años, dice que su viaje al espacio valió la pena cada centavo. Su padre, Owen Garriott, era un astronauta. Creció aprendiendo y pensando en el espacio y sintió que su vida cambiaba cuando miraba al planeta desde dentro de la Estación Espacial Internacional.
Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
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Los viajeros lunares han hecho un “depósito significativo”, de acuerdo con un posteo de la semana pasada en el sitio web de SpaceX , pero el precio total y las identidades de los turistas no han sido revelados.
La microgravedad que permite lo que Garriott de Cayeux describe como un movimiento “alegre, libre de sentimiento” asociado con los astronautas también tiene un grave efecto fisiológico.
“Los fluidos corporales dejan de fluir normalmente, por lo que, en el espacio, las caras de las personas parecen hinchadas, y generalmente tienen los ojos inyectados en sangre”, dice. “Se siente como estar en un tobogán para niños cabeza abajo. Los primeros días, se siente un poco de dolor de cabeza”. “Estos síntomas pueden ser remediados fácilmente con medicamentos comunes, como aspirina y Sudafed.
Otro efecto secundario proviene del líquido flotante en el oído interno, que normalmente ayuda a una persona a detectar el movimiento y mantener el equilibrio. En el espacio, por supuesto, también comienza a flotar.
“Si mueves la cabeza hacia adelante, se deslizará hacia atrás y te hará sentir como si estuvieras cayendo hacia atrás”, dice Garriott de Cayeux. “Hay un desacuerdo entre lo que ves que estás haciendo y lo que tu cuerpo piensa que está haciendo, y eso a menudo causa mareo”.
Esta desconexión perceptual tiende a durar unos tres días antes de que el cerebro comience a compensar. Cuando regresas a la Tierra, tarda otros tres días en reajustarse. Esta es otra desventaja del turismo espacial que se puede tratar con medicación.
Otros desafíos físicos son más difíciles de abordar y también menos agudos. Los seres humanos en el espacio sufren atrofia muscular y ósea. Los viajes espaciales requieren exposición a niveles crecientes de radiación, lo que puede llevar a sorprendentes efectos visuales.
Capacitar y prepararse mentalmente será probablemente el principal desafío para la próxima generación de turistas espaciales. “Esto no es como un avión donde los pilotos se sientan en el frente y hay una cabina de pasajeros en la que están sirviendo té y café”, dice Garriott de Cayeux.
“Pasé por todas las mismas clases que cualquier otro astronauta y cosmonauta”. Eso incluía aprender cómo operar cada pieza de equipo a bordo de la nave, incluyendo radios y sistemas de seguridad, y estudiar una larga lista de posibles fallas.
A pesar de las molestias y las dificultades de los viajes espaciales, Garriott de Cayeux, ahora de 55 años, dice que su viaje al espacio valió la pena cada centavo. Su padre, Owen Garriott, era un astronauta. Creció aprendiendo y pensando en el espacio y sintió que su vida cambiaba cuando miraba al planeta desde dentro de la Estación Espacial Internacional.
Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
La próxima ola de turistas espaciales necesitará una alta tolerancia a la incomodidad.
Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
“Mi consejo para ellos sería medicar pronto y a menudo”, dice Richard Garriott de Cayeux, el desarrollador de videojuegos y empresario que pagó US$ 30 millones a Space Adventures de Rusia para pasar 12 días a bordo de la Estación Espacial Internacional.
Los viajeros lunares han hecho un “depósito significativo”, de acuerdo con un posteo de la semana pasada en el sitio web de SpaceX , pero el precio total y las identidades de los turistas no han sido revelados.
La microgravedad que permite lo que Garriott de Cayeux describe como un movimiento “alegre, libre de sentimiento” asociado con los astronautas también tiene un grave efecto fisiológico.
“Los fluidos corporales dejan de fluir normalmente, por lo que, en el espacio, las caras de las personas parecen hinchadas, y generalmente tienen los ojos inyectados en sangre”, dice. “Se siente como estar en un tobogán para niños cabeza abajo. Los primeros días, se siente un poco de dolor de cabeza”. “Estos síntomas pueden ser remediados fácilmente con medicamentos comunes, como aspirina y Sudafed.
Otro efecto secundario proviene del líquido flotante en el oído interno, que normalmente ayuda a una persona a detectar el movimiento y mantener el equilibrio. En el espacio, por supuesto, también comienza a flotar.
“Si mueves la cabeza hacia adelante, se deslizará hacia atrás y te hará sentir como si estuvieras cayendo hacia atrás”, dice Garriott de Cayeux. “Hay un desacuerdo entre lo que ves que estás haciendo y lo que tu cuerpo piensa que está haciendo, y eso a menudo causa mareo”.
Esta desconexión perceptual tiende a durar unos tres días antes de que el cerebro comience a compensar. Cuando regresas a la Tierra, tarda otros tres días en reajustarse. Esta es otra desventaja del turismo espacial que se puede tratar con medicación.
Otros desafíos físicos son más difíciles de abordar y también menos agudos. Los seres humanos en el espacio sufren atrofia muscular y ósea. Los viajes espaciales requieren exposición a niveles crecientes de radiación, lo que puede llevar a sorprendentes efectos visuales.
Capacitar y prepararse mentalmente será probablemente el principal desafío para la próxima generación de turistas espaciales. “Esto no es como un avión donde los pilotos se sientan en el frente y hay una cabina de pasajeros en la que están sirviendo té y café”, dice Garriott de Cayeux.
“Pasé por todas las mismas clases que cualquier otro astronauta y cosmonauta”. Eso incluía aprender cómo operar cada pieza de equipo a bordo de la nave, incluyendo radios y sistemas de seguridad, y estudiar una larga lista de posibles fallas.
A pesar de las molestias y las dificultades de los viajes espaciales, Garriott de Cayeux, ahora de 55 años, dice que su viaje al espacio valió la pena cada centavo. Su padre, Owen Garriott, era un astronauta. Creció aprendiendo y pensando en el espacio y sintió que su vida cambiaba cuando miraba al planeta desde dentro de la Estación Espacial Internacional.
Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
La próxima ola de turistas espaciales necesitará una alta tolerancia a la incomodidad.
Si todo va según lo planeado, Space Exploration Technologies Corp., de Elon Musk, enviará a dos personas –que pagarán su pasaje- alrededor de la luna y de vuelta el próximo año.
“Mi consejo para ellos sería medicar pronto y a menudo”, dice Richard Garriott de Cayeux, el desarrollador de videojuegos y empresario que pagó US$ 30 millones a Space Adventures de Rusia para pasar 12 días a bordo de la Estación Espacial Internacional.
Los viajeros lunares han hecho un “depósito significativo”, de acuerdo con un posteo de la semana pasada en el sitio web de SpaceX , pero el precio total y las identidades de los turistas no han sido revelados.
La microgravedad que permite lo que Garriott de Cayeux describe como un movimiento “alegre, libre de sentimiento” asociado con los astronautas también tiene un grave efecto fisiológico.
“Los fluidos corporales dejan de fluir normalmente, por lo que, en el espacio, las caras de las personas parecen hinchadas, y generalmente tienen los ojos inyectados en sangre”, dice. “Se siente como estar en un tobogán para niños cabeza abajo. Los primeros días, se siente un poco de dolor de cabeza”. “Estos síntomas pueden ser remediados fácilmente con medicamentos comunes, como aspirina y Sudafed.
Otro efecto secundario proviene del líquido flotante en el oído interno, que normalmente ayuda a una persona a detectar el movimiento y mantener el equilibrio. En el espacio, por supuesto, también comienza a flotar.
“Si mueves la cabeza hacia adelante, se deslizará hacia atrás y te hará sentir como si estuvieras cayendo hacia atrás”, dice Garriott de Cayeux. “Hay un desacuerdo entre lo que ves que estás haciendo y lo que tu cuerpo piensa que está haciendo, y eso a menudo causa mareo”.
Esta desconexión perceptual tiende a durar unos tres días antes de que el cerebro comience a compensar. Cuando regresas a la Tierra, tarda otros tres días en reajustarse. Esta es otra desventaja del turismo espacial que se puede tratar con medicación.
Otros desafíos físicos son más difíciles de abordar y también menos agudos. Los seres humanos en el espacio sufren atrofia muscular y ósea. Los viajes espaciales requieren exposición a niveles crecientes de radiación, lo que puede llevar a sorprendentes efectos visuales.
Capacitar y prepararse mentalmente será probablemente el principal desafío para la próxima generación de turistas espaciales. “Esto no es como un avión donde los pilotos se sientan en el frente y hay una cabina de pasajeros en la que están sirviendo té y café”, dice Garriott de Cayeux.
“Pasé por todas las mismas clases que cualquier otro astronauta y cosmonauta”. Eso incluía aprender cómo operar cada pieza de equipo a bordo de la nave, incluyendo radios y sistemas de seguridad, y estudiar una larga lista de posibles fallas.
A pesar de las molestias y las dificultades de los viajes espaciales, Garriott de Cayeux, ahora de 55 años, dice que su viaje al espacio valió la pena cada centavo. Su padre, Owen Garriott, era un astronauta. Creció aprendiendo y pensando en el espacio y sintió que su vida cambiaba cuando miraba al planeta desde dentro de la Estación Espacial Internacional.
De acuerdo con el último Barómetro OMT del Turismo Mundial, los resultados del año 2016 sobre el gasto de los principales mercados emisores reflejan un aumento de la demanda del turismo internacional en todo el mundo.
China sigue a la cabeza del turismo emisor internacional, seguida por Estados Unidos, Alemania, el Reino Unido y Francia.
En 2016, el turismo internacional ha estado en auge en China, el mayor mercado emisor del mundo. El gasto en turismo internacional aumentó en 11 mil millones de dólares, hasta los 261 mil millones de dólares, lo que supone una subida del 12 por ciento.
Mientras que la cantidad de personas que viajaron al extranjero se incrementó en un 6 % en 2016, hasta los 135 millones. Este crecimiento consolida la posición de China como el primer mercado mundial desde 2012.
El gasto en turismo de los Estados Unidos, se encuentra como el segundo mayor mercado emisor del mundo, aumentó en un 8% en 2016, sumando 9 mil millones de dólares hasta situarse en los 122 mil millones de dólares.
En tanto que Alemania, el Reino Unido, Francia e Italia son los cuatro mercados europeos situados entre los diez primeros y todos registraron un crecimiento de la demanda de turismo emisor en el pasado año.
Alemania, el tercer mayor mercado del mundo, experimentó un aumento del 5% en el gasto en turismo internacional y alcanzó los 81 mil millones de dólares.
Reino Unido, el cuarto mercado emisor en el ranking mundial, pese a la notable depreciación de la libra esterlina en 2016. Las visitas de los residentes en el Reino Unido al extranjero se incrementaron en 5 millones (+7 %) en 2016 hasta situarse en los 70 millones, con un gasto cercano a los 64 mil millones de dólares.
Francia, el quinto mercado en importancia en el mundo, registró un crecimiento del 7% en el gasto turístico en 2016, que supuso un total de 41 mil millones de dólares e Italia experimentó un crecimiento del 1 % del gasto, hasta los 25 mil millones de dólares, un aumento del 3% en los viajes con pernoctación, que se situaron en 29 millones.
Con un avance de 8 posiciones con respecto al último informe del Foro Económico Mundial, México se mantiene como el destino turístico favorito de América Latina.
Según el Índice de Competitividad de Viajes y Turismo 2017 del Foro Económico Mundial, la industria turística movió US$7.600 millones en el mundo y creó 292 millones de puestos de trabajo en 2016.
Teniendo en cuenta que el turismo representa 1 de cada 10 empleos a nivel global, la importancia del sector se torna crucial para el futuro de las economías latinoamericanas.
Entre 2013 y 2015 el número de llegadas internacionales aumentó de 170 a 201 millones de personas, 90 de los cuales llegaron a América Latina y el Caribe.
Entre las causas más probables de este aumento se encuentra el bajo precio de los combustibles.
Un continente desigual
América es, sin duda, una de las macrorregiones más "amigables" para el turismo internacional y la segunda que más ha mejorado desde la última edición del informe, por detrás de la región Asia-Pacífico.
Aunque parte de la explicación de la buena salud del sector se debe a la riqueza de recursos naturales del continente, el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) destaca las grandes diferencias que existen entre países.
En el caso de América del Norte, el WEF recomienda una mejora de la competitividad de precios, la sostenibilidad medioambiental y las infraestructuras para que el sector turístico siga creciendo.
América Central y Sudamérica, por el contrario, han de hacer un esfuerzo por aumentar la seguridad, así como crear ambientes propicios que faciliten el desarrollo de negocios e infraestructuras que potencien la conectividad, apunta la organización.
De las 136 economías que representan el 98% del Producto Interno Bruto mundial, 18 pertenecen a América Latina y 6 de ellas se cuelan entre las 50 más competitivas a nivel global.
La lista, sin embargo, la encabezan seis naciones europeas -España (1), Francia (2), Alemania (3), Reino Unido (5), Italia (8) y Suiza (10)-, dos de América del Norte -Estados Unidos (6) y Canadá (9)-, además de Japón (4) y Australia (7).
México (posición 22)
Es el país más visitado de América Latina con más de 32 millones de turistas extranjeros anuales.
"El turismo es un gran generador de empleo y es el gran motor de la economía", dijo Enrique de la Madrid, secretario de Turismo de México, durante la presentación del informe en Buenos Aires.
No en vano, el turismo representa el 8,6% del PIB de México.
A pesar de que el sector avanzó 8 posiciones con respecto al reporte anterior (2015), el Foro Económico Mundial cree que el gobierno debe concentrarse en mejorar la sostenibilidad ambiental, el ambiente de negocios y la seguridad y protección de los turistas.
"Todavía hay mucho por cubrir, como estimular regiones y seguir impulsando la conectividad aérea", declaró De la Madrid.
Brasil (27)
Con poco más de 6,3 millones de visitantes extranjeros, Brasil sigue siendo uno de los principales destinos turísticos del continente.
En cifras, el turismo aportó US$5.800 millones a la primera economía de América Latina.
Aunque es uno de los países con mayor diversidad natural y cultural de Sudamérica, el aporte del turismo a la economía brasileña representa el 3,3% del PIB y genera 2,6 millones de puestos de trabajo en el país.
Panamá (35)
La situación geográfica y un entorno muy favorable para hacer negocios colocan a Panamá como la tercera potencia turística en el índice de este año.
El año pasado llegaron 2,1 millones de visitantes que dejaron US$4.153 millones en el país.
Con un aporte del 8,1% al PIB nacional, el turismo concentra casi el 9% de los empleos en Panamá.
Costa Rica (38)
El turismo ecológico y la riqueza de recursos naturales son las dos principales atracciones de Costa Rica.
Con casi el 5% de la población activa dedicada al turismo, el sector aporta el 4,8% al PIB costarricense.
En los últimos años Costa Rica se ha ganado el honor de estar entre las naciones más sostenibles y felices del mundo, según Happy Planet y el propio Foro Económico Mundial.
Áreas protegidas y parques nacionales -dos de ellos declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco- ocupan el 20% del territorio del país.
Chile (48)
Casi 4,5 millones de turistas visitaron Chile en 2016, lo que dejó US$2.408 millones.
Pero el sector sigue teniendo poco impacto en la economía chilena, representando tan sólo el 3,4% del PIB nacional.
Argentina (50)
Por delante de Perú que está en el puesto 51, Argentina cierra el listado de los 50 países más competitivos del mundo a nivel turístico.
Para seguir escalando posiciones, el gobierno anunció un ambicioso plan estratégico que tiene como objetivo la creación de 300.000 nuevos puestos de trabajo hasta 2019.
Para lograr el objetivo de posicionar a Argentina como principal destino turístico de la región es necesario "promover el crecimiento del turismo interno, mejorar la competitividad y sustentabilidad del sector; aumentar la inversión y, por último, promover la creación de empleo", dijo Gustavo Santos, ministro de Turismo de Argentina, durante la presentación del informe en Buenos Aires.
Para ello, el gobierno que preside Mauricio Macri ha permitido la entrada de las aerolíneas low cost en el sector turístico.
Así, a partir de ahora podrán operar en el país compañías como American Jet, Andes, Alas del Sur o Fly Bondi que, según las previsiones del ejecutivo argentino, ayudarán a aumentar hasta en un 50% la llegada de pasajeros y generarán 25.000 nuevos puestos de trabajo.