“En el Null Stern Hotel la única estrella eres tú”. Bajo este lema se esconde la curiosa propuesta hotelera de los artistas conceptuales Frank y Patrik Riklin, que para reírse de los artificios de los alojamientos de lujo han decidido instalar una habitación sin paredes, techo ni baño a más de 2.000 metros de altura en los Alpes suizos.
Los huéspedes sólo disponen de una cama de matrimonio y un par de mesillas con lámpara, pero ¿quién necesita más para disfrutar de la inmensidad de las montañas y un cielo estrellado?
La experiencia, que se inició como una ‘performance’ artística, ha sido un éxito. De hecho, todas las noches de la temporada de verano –la única en la que este peculiar hotel está abierto y que termina el próximo 31 de agosto– están reservadas. Y eso que no es precisamente una ganga: dormir al raso cuesta 250 euros la noche.
La intención de los promotores de la iniciativa, junto con los responsables de turismo de la región suiza de Safiental, es repetir y ampliar el número de camas disponibles para el año que viene.
Una propuesta muy original Vladi!!!
ResponderBorrarUna propuesta muy original Vladi!!!
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