El compost, un primer paso para cuidar el planeta.

Una idea muy fácil de hacer y con muchos resultados positivos para el medio ambiente y también para el crecimiento de nuestras plantas, es realizar nuestro propio compost.
Se trata de algo que podemos hacer todos y que no nos demanda mucho tiempo. 
Cualquier rincón del patio de la casa, o algún contenedor son suficientes para comenzar con esta pequeña ayuda al planeta. Simplemente consiste en separar la basura orgánica que desechamos a diario y arrojarla en ese contenedor, o hueco en la tierra. Al cabo de un par de meses, la basura orgánica comienza a desintegrarse de a poco formando así una tierra fértil, un buen abono para nuestras plantas. 
Es recomendable cada 2  meses mezclar con una pala esa basura para ayudar al proceso de desintegración. Si podemos hacerlo 1 vez a la semana sería lo ideal. 
Si en cada casa se pudiera realizarse este pequeño proyecto, ayudaríamos entre todos a sustentar al planeta. Y reduciríamos muchísimo la basura. 
Y si lleváramos esa idea a nuestra casa común, nuestra ciudad, se solucionarían varios problemas. Poniendo un compost en cada zona estratégica de la ciudad, podríamos darle un mayor cuidado a nuestro medio ambiente y la ciudad estaría cada vez mejor, y más linda para recibir visitas. Igualmente la visibilidad de los compost generaría una toma de consciencia en las generaciones nuevas al verlos como parte de lo cotidiano. Si todos nos comprometemos, nuestros granitos de arena se volverá más importantes en el cuidado del planeta. 

¡Pongamos en práctica la realización de compost!