Bautizado con el nombre de Leo en honor al mismísimo Leonardo da Vinci, este innovador robot puede transportar hasta 32 kilos de peso, por lo que si sois de los que viajan con medio armario en la maleta, no hay problema.
Bromas aparte, el objetivo de este nuevo dispositivo es evitar que los pasajeros eviten las largas esperas en la cola de registro del Aeropuerto Internacional de Ginebra. Para ello, el usuario sólo tiene que abrir el compartimiento de equipajes y depositar su maleta, escanear su tarjeta de embarque y acto y seguido se imprimirá un ticket que debe ser colocado en el equipaje. Una vez hecho esto, Leo cierra la compuerta y va derecho hacía el mostrador de facturación para depositarlo.
Para evitar chocar con las personas que circulan por la terminal, el robot ha sido equipado con un sistema especial que le permite detectar a todo aquel que pasa por su lado. Solamente los trabajadores de las compañías aéreas que operan en el aeropuerto pueden abrir la compuerta del equipaje, para después ubicarlo en la bodega del avión, garantizando así la seguridad de los bultos.
Además, Leo también es capaz de orientar y solucionar las dudas que los pasajeros pueden tener en relación con la seguridad del aeropuerto ginebrino.
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